¿CUÁL ES LA HISTORIA?
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Cada mes, «Las historias» convoca a su concurso ¿Cuál es la historia?. El modo de participar es el siguiente:
0) Buscar, el primer día del mes, la nueva imagen publicada en la bitácora: será una foto o un dibujo extraído de su contexto y sin mayores explicaciones.
1) Suponer que la imagen ilustra una historia.
2) Imaginar cuál es esa historia: qué está pasando allí, qué momento se anuncia, por qué, quiénes están allí, qué hacen.
3) Escribir la historia, en forma de cuento brevísimo (minificción), en los comentarios de esta misma nota.
Los ganadores de cada mes reciben un trofeo virtual, pero trofeo al fin. Todos quedan invitados.
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La mano izquierda
La mano derecha estaba sangrante de rutina, sin embargo ese único instante valía todos los sobresaltos de cada noche, limpiar los restos de su navaja como parte de su ritual, soñar con la próxima vez, volver a empezar, buscar una nueva victima.
Cada noche la seguía ,con su taimada paciencia , anotaba los lugares de sus pasos , identificaba su perfume , memorizaba su rostro , se acercaba a sus noches, velando su sueño desde una pavimentada soledad con el desvelo en las cuencas oculares, revisaba el tiempo en las nocturnas nubes de gris melancolía y después dormía poco muy poco,
La mañana llegó con su sibilante cercanía fantasmal, todos tan cerca del diario transitar y tan lejos de pertenecer al mundo, siempre había forma de llevar el trabajo a niveles divertidos, pero salir en busca de ese nuevo rostro, de ese cuerpo voluptuoso, de esa tímida sonrisa inocente, volver cercano lo que es ajeno, encontrar las palabras de una vieja imagen que le deslumbraba hasta el cerebro, eso era vivir.
Con su mano izquierda limpia, primero quitó cualquier rastro de su arma y lanzó el pañuelo desechable por el resquicio de la ventana del automóvil, recorrió los filosos bordes de su navaja con las yemas de sus dedos y después la guardó con su mano izquierda, que tu mano izquierda no sepa lo que hace tu derecha.
La cualidad de aquel libro, con negras pastas de piel gastada y oscuros grabados es que era mágico, y como tal, cumplía algunos deseos. Shatz lo consiguió casualmente, entre un montón de objetos anticuados que se pusieron a la venta cuando murió la vieja señora Ruth. Le gustaban los libros así, antiguos. Los prefería a las nuevas ediciones sin historia y sin esas ilustraciones oscuras y llenas de personajes trágicos o aberrantes. Cuando lo compró nunca imaginó las cosas que podían hacerse con él, así que lo llevó confiado a su casa y lo puso dentro de sus otros preferidos para disfrutarlo a media noche, que era cuando gozaba mejor de ciertas lecturas, acompañado por las velas que provocaban con su luz sombras vivas y danzantes alrededor suyo.
Llegada esa hora, hora favorita y esperada, Shatz se sentó en su sillón y abrió al azar el volumen. Las bujías encendidas le daban al agua del viejo Flipo, el pez dorado, extraños reflejos de ópalo, traslúcidos y ondulantes. Lo primero que observó al bajar la vista, fue el dibujo de un viejo mago con sus cinco largos dedos de la mano izquierda extendidos hacia una pequeña esfera de cristal puesta sobre una mesa oscura. La página reseñaba “sueña y recibe si en la mandrágora confías”; la segunda mano, se mantenía cerrada sobre el pecho del Merlín mientras su dedo índice se extendía al lector como invitando a seguirlo. Shatz tocó con su dedo el del hechicero siguiendo un impulso, al tiempo que la lluvia rompía brutalmente el silencio de la noche. Sería el ambiente, o la hora o simplemente la mala fortuna, pero Shatz pidió un deseo. El rayo iluminó la estancia espectralmente entonces. Con aquella luz azulada pudo notar que al fondo del dibujo, a los pies del mago, se encontraba la planta mencionada en la cita, con su follaje por cabello, danzando con su contrahecho cuerpecillo, similar al de un humano, y que parecía mirarlo reclamando su atención. Nuestro asombrado lector tocó de nuevo el grabado, ahora sobre el espectral bulbo y se quedó dormido al instante.
Cuando el día llegó, pensó que había tenido un mal sueño. Se levantó de un salto y se dirigió a sus deberes consciente de lo tarde que era cruzando el pueblo con prisa. Aterrorizadas, las personas gritaban al verlo; se apartaban y corrían. Fue hasta que llegó al arrollo cuando supo el porqué. Al bajar la vista vió reflejado en sus aguas a un monstruo y recordó con espanto e incredulidad su deseo: había querido ser nada menos que ¡un cíclope!, capricho debido a las constantes y amadas lecturas de Homero y que por su mórbida imaginación y las malas artes del viejo mago, se había transformado precisamente en eso. Supo, cuando regresó a casa y abrió desesperado el libro, que su otro ojo se había quedado atrapado en la bola de cristal de la mesa y que desde allí le miraría eternamente reclamándole con sus venas hinchadas su esclavitud dentro de la bola y del libro. Notó también con horror que un sinfín de pequeñas esferas que no había distinguido claramente la noche anterior, se empolvaban en una repisa que estaba atrás del hechicero al tiempo que éste sonreía macabramente. Un escalofrío recorrió su espalda al imaginar los contenidos pagados como precio en cada deseo pedido al grabado por las manos de quien había tenido al libro antes que él. No pudo dar marcha atrás para volver a ser como antes por más intentos que hizo.
A pesar de lo trágico, la historia no tuvo un final triste. Shatz se incorporó a Barnum, el circo; para ser un fenómeno más y como se sabe, recorre todavía el mundo asombrando a quienes se atreven a verlo. No la pasa mal, pronto será rico. Lo que no pudo explicarse, fue por qué el viejo Flipo estaba también dentro de la bola. Un capricho de la mandrágora seguramente. Quizá le aburría estar a solas con el viejo mago y con los horrores decadentes contenidos en las otras esferas.
SAGITARIUS Y LA DIOSA DE LOS SUEÑOS
Fue un 25 de Octubre del año 2009 cuando conocí a Laura, Su forma de hablar algo mágico envolvía sus palabras una escritura realmente extraña, me inquietaba hablar con ella, su suave aroma que me transmitía a pesar de nuestras distancia extremas, ella vivía al sur oeste a muchos kilómetros si así podría llamarlo.
Desde ese día todo empezó a cambiar en mi vida, mi diario cotidiano cambio radicalmente, el corazón se me endulzo. Hablábamos todos los días 160 minutos, sin agotarnos la empecé a conocer, sentía su interés también hacia mi, un amor raro empezaba a nacer entre nosotros. Laura era una chica de 20 años media 1.72 tez blanca como la de un ángel, sus mejillas eran tercios de algodón, sus labios tan suaves que me moría por rozarlos con la mano.
Todo eso pude imaginarme y después de un buen tiempo la llegue a ver en fotos y otras ilustraciones de la informática, Laura era muy paciente al conversar, parecía que tuviera la sabiduría en cada palabra, y bastante culta en su expresión, fue asi entonces como ella y yo iniciábamos el camino largo en recorrer, quizás sin dejar huellas de nuestro amor, porque nunca la había visto y jamás había conversado en persona con ella. Solamente bastaba imaginarnos entre nosotros, cada cita cada detalle, cada beso. Solo podíamos recrear en nuestros ambientes, un día salimos a caminar, ella llego a cusco, descendió del avión, y lo primero que hizo fue buscarme entre la gente, yo estaría con una chaqueta azul supuestamente, pero obviamente no cumplí con eso por que tenia un poco de miedo, así que mirando entre la multitud, no logro encontrarme, hasta que la vi…No pude contenerme una expresión en mis ojos, era admiración o quizás.. como si uno viera un arco iris en lluvia de diciembre, una alegría fatal capaz de vender el mismo alma. Realmente era ella por fin..Llegaste me dije entre si, y lo primero que quería era simplemente oír su voz, con ese acento argentino que siempre me había llamado la atención desde muy niño.
Quede admirado, peor un nudo se me atravesó en la garganta, quería empezar a llover y bueno no quise decirle que yo era “F” no se que me paso, quise esperar que se sienta un poco cómoda quizás o quizás, quería que empiece a notar que sus ojos pedían ayuda, a nadie conocía ella por lo visto, Pero no pude evitar el respiro, le levante la mano como gesto de despedida y ella sonrió, me puse sonrojado sin saber que decir, ni que hacer, así que preferí darle un abrazo y ocultar mi rostro y mis miedos “LAURAAAA” eres tuuuu le dije, y la única palabra que podía atinar en ese momento era decir TE AMO. Porque otra palabra no cabia entre tanta emoción.
Bueno entonces salimos enrumbados en un taxi, le ayude a llevar las maletas, tenía tres maleta y una mochila azul, lo primero que hablamos en el camino fue ¿A dónde iremos? Bueno yo no pensaba dejarla en ningún motel , no quería separarme de ella ni un solo instante, todo el amor que sentía por ella iba encuadrándose como en cuadriculas exactas, como el tetris, todo entendía, me encantaba todo de ella, desde su manera de pensar, porque se quedo como 30 segundos en silencio mientras el taxista trataba de mirar de reojo la parte posterior por su retrovisor, entonces yo agarre sus manos como si se tratara de un reencuentro de amor de alguien a quien me habían arrebatado hace muchos años, quizás 100 quizá mas.. no lo sé, era tan mágico. Me agradaba su sabor, un aroma a divinidad, nos acomodamos bien en el taxi quizás una vuelta la ciudad, no importaba el dinero. Quería tenerla un momento agarrar sus manos y le pedí permiso para dar un beso en la muñeca, y cogiendo su meñique y el anular. Me gusto la suavidad de sus manos.
Ya eran como las 5:45 de aquel día inexistente, un paradigma de por vida, recorrimos un poco la ciudad y así pude robarle un poco de sonrisa a su día tan agotador, la note muy contenta, y quizá confundida también era algo extraño, era el primer día de nuestras vidas algo para contar a nuestros nietos y bisnietos, nos llenamos de abrazos y me dieron unas ganas de besar sus labios, pero me dije que no, porque no sería adecuado quizás, así que preferí darle un beso en la mejilla izquierda, sintiendo su frialdad, empezaba a llover 5:52, note una lagrima en sus ojos vibrar y vi como mojo su rostro, yo también me puse raro en ese instante, no estábamos locos¡ solamente que a veces no se entiende, como es que nos conocimos y ahora nos amamos, quizás éramos la pareja perfecta, quizás solo un sueño o una gran aventura, al final de cuentas todas las aventuras son intensas y excitantes. Cada aventura es única y en ese instante si uno decide tener una aventura amorosa hace un contrato con el olvido.
Peor ambos sentíamos un temor a lo desconocido, pero aun así yo era muy consciente que ella había arriesgado bastante por mí, y al elegir viajar muchas millas al noreste para encontrarse con alguien que le hablo del amor, no cavia otra cosa en mi mente y me decía a cada instante que era necesario que yo la tenía que amar con las entrañas, yo anhelaba bastante amarla, quería cuidar de ella con tal emoción como cuando uno recrea una nueva canción, como cuando compuse una balada llamada, “Laura es esperanza” .
Por fin llegamos a casa eran las 6:04 de la noche, la lluvia había cesado en esta parte de la ciudad, Cusco se caracterizaba por tener un clima raro, si llovía en el centro de la ciudad a veces en la parte de abajo aun estaba seca, o viceversa, peor bueno ahora había dejado de llover aquí , bajamos del auto y siempre creí que era necesario anotar las placas así que anote en un papelito cuando empezamos a tomarlo, UTZ-536 satino amarillo, más o menos del año 2007 y el conductor más o menos de unos 38 años de edad. Llegando a casa, El conductor se atrevió a ayudarnos hasta la puerta de mi la casa, Ella dio un respiro fresco por el clima, y subimos al segundo pido pasando por el callejos de la casa.
Sin miedo a nada ella entro como si confiara plenamente en mi palabra y con un poco de timidez, empezó a preguntarme algunas dudas, nos sentamos en el sillón de manera cansada tirado en el sillón, y empezando a explicar cada lienzo de la sala íbamos entablando conversación, el primero era un cuadro color verde, que figuraban unos papagayos de colores, mezclas de rojo y el verde, y una mancha que carcomía simbolizando la muerte del medio ambiente, y así íbamos observando la casa, seguidamente entramos en la sala donde se ensaya , estaba ahí la batería acústica, una bajo y una guitarra eléctrica de tres años de antigüedad, me pido que la tocara así que cante una canción suavecita, estaba un poco afónico así que corte en la mitad excusándome por la voz, otra vez volvimos a las sillas y puse esa canción de Alejandro Sanz, Si tú me miras, y otra llamada soledad, todas esas canciones acompañaban en tu ausencia le dije, ella era bastante cariñosa, realmente un sueño difícil de creer por su belleza y hermosura de ambas, por fin llegue a verla completamente a Laura, su cabello era perfecto su rostro me inspiraba un confianza y su expresión, la charla se extendió durante tres horas mas o menos pude robarle varias carcajadas y sentir su alegría, en realidad se sentiría a gusto conmigo? A veces me lo preguntaba yo.
Era como haberse encontrado después de mucho esperar, yo trataba de darle las comodidades del caso, ella saco una casaca de su maleta para abrigarse un poco y yo le preste una chalina roja que tenía en casa, eran como las 9:30 sentí un cansancio en ella, quizá tendría sueño después del largo viaje, y a pesar que prometimos no dormir el primer día, peor ambos estábamos agotados, quizás por el encuentro un desgaste emocional? Quizás. Le invite a dormir yo tenía unas la cama en casa, ella me miro a los ojos y me sonríe una vez más, y me dijo¡ y tu donde dormirás? Jajaja se me salió una carcajada y seguidamente a ella también.
Bueno no quería causar incomodidad, así que le di mi cama para ella, yo me acomodo en el sillón, Total nadie se a muerto por dormir en el sillón le dije , sonriendo. Solo quería darle confianza, recordé que no habíamos comido nada desde que llego, deseas comer algo? Le pregunte (Pregunta tonta , lo seee) bueno Salí rápidamente a comprar galletas, agua mineral pro si se le ocurre tomar agua.
Bueno en realidad tiene una larga historia que contar todo esto, porque no la espere o quizás no estaba preparado, ella supuestamente tenía que llegar hace 4 meses atrás peor no llego jamás, yo recuerdo es día haber preparado una pequeña cena en casa, solo para un dúo, aliste una mesita pequeña, le puse una teta especial sobre la mesa color granate, y aliste todo y no podía olvidarme de las dos velitas para no prender la luz, quizá me sonaba mas novelesco, era simplemente una sensación rara. Y ese dia recuerdo que jamás se apareció, y después de un rato un gran mensaje de texto: (Amor no podre me robaron todo, pasaporte, DNI,. etc.) realmente una gran excusa, no lo sé quién sabe? Solo DIOS.
Esa fue la razón por la cual, no la espere en esta ocasión, llego el momento de poder pasar la primera noche respirando el mismo aire, robándole miradas y carcajadas, mi vida había sido hasta ese momento un laberinto de lechos desvanecidos por la tristeza, por la pronta espera, ese largo trayecto que me llevaba a pisar diferentes mundos y estados de ánimo, era tan difícil esperar un año? Se me hacía imposible esperar más, escuchábamos una canción llamada el “pacto” a pianísimo volumen muy linda, a petición de ella, nos acostamos a dormir, tenía el lecho precisamente para ella todo listo, un camino por recorrer, le puse un cubrecama granate, en la almohada un peluchón de osito para que no tenga frio, y yo me acomode en el sillón verde del salón, esa noche soñé que todo era sepia, y parecía aclararse el laberinto, viajaba por valles lleno de arbustos verdes, un paraíso eterno.
Por fin amaneció, despertamos¡¡ entre a la habitación, OH? Era un puto sueño otra vez, no podía creerlo, pero si era tan real, anoche la acomode? Anoche la converse y había perdido la brújula de la realidad, que estaría viviendo el sueño en ese instante o la realidad, seria un castigo de Dios? O una señal, diciéndome que aun existía el amor? A ella la conocí un 25 de octubre en el Messenger y hasta ahora la espero
Descendientes del Crepísculo 571
Antes de que por primera vez se alimentaran con el cadaver de uno de los tripulantes, lo hicieron con la sangre de un resto que quedó al descubierto en la avalancha que sepultó los restos de la nave.
Ese muerto, o no muerto, o no muerta para ser más preciso, era una princesa quechua que había sido escondida por sus súbditos en os tiempos de la Conquista, para evitar que fuera quemada en por la Santa Inquisición.
Fue después que bebieron de ella y ella de ellos, que comenzaron a alimentarse de los que habían fallecido o seguían falleciendo por renunciar a la ¿vida?
Lo único que les había pedido a cambio era que le entregaran a cada uno de sus primogénitos, para volver a formar su Imperio. No todos cumplieron, y sobre aquellos que no lo hicieron y sobre su descendencia cayeron maldiciones y desgracias aterradoras.
[…] donde se aborda este género (y se promueve) en habla castellana son muchos. Yo destaco tres: “Las Historias” de Alberto Chimal, “Químicamente impuro” y “Breves no tan breves”.140 […]
[…] […]
El octavo día
La nada y el vacío se reunieron pues podrían ser diferentes y lo fueron, de ellos nació el cero y del doble cero nacimos nosotros, los humanos.
Primero creamos al día, y hubo días.
Y al segundo separamos las tierras de las aguas de la imaginación, separamos al útero eterno, fuente completa, del calor del hombre y de la piedra.
Al tercer día decoramos la oscuridad y le dimos el nombre de noche, pusimos en sus entrañas puntos vagos, nubes, y a la mejor de nuestras hijas. Para que ella brillara con paciencia, no le dimos luz, sino que la hicimos espejo, reflector eterno del otro.
Y como se acabó el día, dejamos que comenzara otro, le dimos nombre y número, fue el cuarto, y con él cerramos la cuenta de las esquinas de la tierra, de los rumbos del universo, de las patas de una mesa. Ese día no importo mucho el tiempo, hicimos lo que había que hacer. Además agregamos el verde a la mirada y confiamos las hojas a los árboles.
Decidimos no terminar cuando el día termino, soñamos con el movimiento y le dimos nombre, forma y variedad. Para que algún día ellos nos alcanzaran y fueran como nosotros, o para que nosotros fuéramos como ellos. Eso no lo recuerdo, pues fue hace tanto.
Al sexto día hicimos el amor y decidimos que era bueno, fundamos la carne, organizamos los órganos e inventariamos una vieja colección que uno de nosotros tenía guardada en el cerebelo. Concebimos un nombre, lo escribimos con humo y no nos pareció, y otro lo garabateo en la tierra y reímos, por eso se llaman humanos, porque su nombre está escrito en el humus de la madre.
Y como siete eran los planetas y no poseíamos más miel del viejo cero, dejamos todo como estaba, sin saber si era bueno o malo, bello o feo, silente o sordo; y algunos decidimos dejar todo así y lo llamamos muerte, otros descansaron en la creación y llamaron a eso vida.
Y al día siguiente, el cero y la nada y la madre, el vacío, se reunieron para regresar de donde habían venido. Quizá Dios los estaba llamando, o quizá, dios era todo eso, y todo lo que habíamos hecho y deseaba volver a ser uno.
Hola, quisiera participar, pero no puedo entrar a ver las convocatorias. Agradecería me indicasen como entrar.
un saludo afectuoso desde Chile
[…] Como parte de su interés en la literatura y el internet, así como por incentivar la creación literaria, Alberto Chimal invita a todo el público a ser parte del concurso ¿Cuál es la historia? que presenta a través de su blog; el primer día de cada mes convoca a escritores, profesionales y aficionados, a crear una historia -un cuento muy breve- a partir de una imagen que el selecciona de una bitácora. El ganador será acreedor de un trofeo virtual, respetando los menesteres del mismo medio y, por supuesto, la oportunidad de ser leído por Chimal. Para ser parte de este concurso, visita:www.lashistorias.com.mx […]