Concurso

Concurso #32

Una vez más, esta bitácora convoca a su concurso mensual. Los interesados pueden comenzar observando esta imagen:

Instrucciones:
1) Suponer que esta imagen ilustra una historia.
2) Imaginar cuál es esa historia: qué está pasando allí, qué momento se anuncia, por qué, quiénes están allí, qué hacen.
3) Escribir la historia, en forma de cuento brevísimo (minificción), en los comentarios de esta misma nota.

El ganador de cada mes será elegido tomando en cuenta la opinión de quienes decidan opinar, y recibirá un trofeo virtual. (Los concursantes deben dejar una dirección válida de correo electrónico, para poder recibir su premio.) La fecha límite para hacer propuestas es el 24 de junio.

Quedan invitados…

23 comentarios. Dejar nuevo

  • ADVERTENCIA
    Al final de la botella no hay olvido, genios olvidados, felicidad perpetua, respuesta alguna. Si tiene suerte lo único que encontrará será un gusano.

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  • Había que deshacerse del resto, el elíxir de fuego ya flota en la sangre con un mensaje para el que la desee enamorar, la bella genio está feliz afuera, después no se sabe qué pueda suceder sin el corcho. Cualquier transeúnte podría embriagarse de ella. El fotógrafo espera ansioso a que la botella esté lejos, disparará y entonces correrá a besarla.

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  • Muy bueno el texto anterior, cambiaría el nombre, tal vez… una sugerencia nomás.

    saludos

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  • Fernanda Sánchez
    02/06/2008 6:26 pm

    PAISAJE
    ¿El Secreto estaría en la botella? quería descubrirlo, absorberlo. Bailaba sin cesar, giraba, deseaba fundirse en ese paisaje otoñal; volver a formar parte del todo. Ser esa hoja seca, la humedad de la tierra, el viento que soplaba. Bebió extasiada las ultimas gotas y se miró en la Luna.

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  • Alejandro Gelaz
    03/06/2008 5:01 pm

    Te acerco tu reclamo para esta nueva noche de juerga y simpatías. Convocas a tus hadas desde las alturas, siendo no obstante, esta simple mortal quien resuelva tu abstinencia. Arrasaste las cosechas de vides, solo quedan los licores blancos. Disfruta viejo dios, con el mejunje que estas manos aún castas quieren ofrendarte. Dionisios, recuerda a esta joven aprendiz de bacante para las futuras concesiones de tus desvaríos. Merecedora soy, por quebrantar tu sobriedad forzada, de recibir la incivil locura de las Ménades y gozar sin tiempo del etílico trance.

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  • Alejandro Gelaz
    03/06/2008 6:51 pm

    APRENDIZ DE MÉNADE

    Te acerco tu reclamo para esta nueva noche de juerga y simpatías. Convocas a tus hadas desde las alturas, siendo no obstante, esta simple mortal quien resuelva tu abstinencia. Arrasaste las cosechas de vides, solo quedan los licores blancos. Disfruta viejo dios, con el mejunje que estas manos aún castas quieren ofrendarte. Dionisios, recuerda a esta joven aprendiz de bacante para las futuras concesiones de tus desvaríos. Merecedora soy, por quebrantar tu sobriedad forzada, de recibir la incivil locura de las Ménades y gozar sin tiempo del etílico trance.

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  • Alicia no era una niña, y el gato no era un gato invisible. Era un gordo hediondo a queso añejo, a calles añejas, a àrboles añejos. Era un fanfarròn obeso y trotamundos, un clochar, un monumento a la vagancia. Cuando le preguntò el camino el anciano gato contestò con una sonrisa sin dientes, aùn màs olorosa, y entre las vetas del humo de su apestosa boca desaparecieron los naipes y la reina y el gato y la prisa y hansel y las migajas y el camino amarillo y el leòn y los gnomos y los gitanitos y los perros que no hablaban y las mesas que no flotaban y la cena y los conejos sin reloj y sòlo cayò sobre Alicia, casi flotando, el amuleto que cargaba siempre el viejo gato invisible.

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  • El juego consistía en golpear el aire agitando una botella vacía, como si de una piñata se tratara. Quien fracturara el mayor número de hilitos de la luz que se colaba entre las hojas en un tiempo determinado, sería nombrado ganador. Para hacer el recuento de hilitos el concursante mostraba la palma de la mano a un jurado experto en artes adivinatorias y dermatología. Tras pocos segundos deliberando, éste llegaba a cifras exactas con milésimas de reflejos. El ganador era premiado con una pañoleta, generalmente de color rojo, que recogía en lunares el monto de su hazaña.

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  • MAS SABE EL DIABLO…
    Los genios primerizos prefieren botellas llenas de herrajes y joyas preciosas, en cuevas increíbles y castillos mágicos, a ellos les piden reinos y milagros. Los veteranos escogen botellas de whiski barato o de cerveza, en bares llenos de humos, a ellos les piden mujeres, cuando más, y la mayor parte de las veces sólo un trago más.

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  • «Tómame la foto cuando me veas sonreír. Que sea como una de esas cámaras automáticas nuevas.» La muy pinche loca dijo. ¿Qué clase de asesino en serio contrata a un fotógrafo? Paso por paso. Ella levanta la botella. Desmaya a la víctima. Y el pendejo documentando todito el pedo. De todos los asesinos, me tenía que tocar la más guapa y enferma. Con una chingada la ética profesional, me la voy a echar. Que me mate pero que me coja. Tan inocente que se ve la cabrona.

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  • HIPOTESÍS DE UNA FUTURA EXTINCIÓN DEL SOL
    Al levantar la botella, y observar a través del fondo, se percató que el sol no era tán grande como decían, éste flotabá suevemente sobre los restos del licor, igual que una hoja amarillenta de papel.
    En el último trago se lo bebió.

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  • La ingenua

    Mientras ella sostenía la botella preguntandosé por que las botellas de vodka no tienen anillo de apilamiento a comentarío de él, aprovecho para bajarle los calzones.

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  • ¿Qué buscas?, Ifigenia querida, al mirarle el culo a esa botella. Intentas, Ifigenia, ver en él tu reflejo sin sombras ni cicatrices y, por eso, lo miras y sonríes aviesa. Pues, habré de decirte, Ifigenia mi amada, que la botella ni ahoga penas, ni las heridas sana, ni los pecados lava. Entonces…, Ifigenia, mi amor, a que le miras el culo a la botella y sonríes traviesa, como sonrío yo, mi amor, cuando el tuyo me muestras.

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  • Comenzó a desear, y así empezó todo. Ahora reclama más y más vino. Lo menos que solía esperarse de una estatua es que no se moviera.

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  • Alejandro Gelaz
    06/06/2008 7:49 pm

    La voz del firmamento le había advertido: en estatua te convertirás si tras catar el brevaje al cielo mirases. Y tú incorregible, ebria al todopoderoso plantaste cara.

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  • MUERTES

    ¿Blandías o simplemente cargabas aquella botella de ron? Hasta hace poco también miraba al cielo mientras bebía la miseria quemante sentado sobre el terraplén. No era yo a quien buscabas. Cuando se odia todos son el mismo.
    ¿Ves bien el cadáver a mis pies? De repente apareció tirado con su máscara de carnaval carmesí. No fue mi intención. No quise hacerle daño… No te alejes… Di el último trago, volteé a la penumbra y, en medio de esa niebla húmeda y densa, distinguí la pálida piel, el rostro desencajado y unos ojos poseídos por la ira y… tus manos, sedientas de dolor. Luego así la botella y la reventé en mil pedazos contra tu cabeza. Ahora debo enjugarte las lágrimas y limpiar la sangre que te tiene toda sucia.
    …Hay un vaho de sudor y alcohol que me impide recordar quién mató a esta persona que yace a mis pies.

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  • Cruzando el día

    Llenó las copas de los árboles con vino hasta hacerlos caer borrachos. Guiño azul delicioso al horizonte, con su bonita manera de pronunciar los hoyuelos, indicándole que cruce de puntitas, suspendido, como mosquito sobre el agua, para no despertar al bosque; de este a oeste, para que la mañana, por primera vez, pudiera salir de noche.

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  • Rebeca Mariana Macias Medrano
    24/06/2008 12:57 pm

    Un bosque de profundidades negras donde niños solo acceden a entrar, el pequeño y ensueño grito de una musa sale de la oscuridad. Son los niños sin miedo que se atreven a escuchar, la promesa juguetona de una hada en la oscuridad. Perdidos están y como única guía una voz con destellos rojos que sale de una botella de cristal, apenas cubierta de arena arrastrada por un riachuelo casi muerto y tragado por la profundidad. Al pie del árbol mas viejo, esta una hada atrapada en cristal que dice–dadme libertad y cambio sueños realidad, armonía y luz abra ¡ca! ¡vun! –.

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  • Botella de Ron

    Decían que debajo de cada botella de licor que bebiera, buscara al genio que me cumpliera un deseo. Yo hice caso, pero después de la cuarta, comencé a ver borroso, se me olvidaban los deseos y creo que el tercero repetí con el cuarto… La verdad es que el ron no se hizo para pedir deseos, si alguna vez les llega ese extraño consejo, no lo tomen como un reto, que las botellas de ron entre más lejos mejor.

    Pero creo que en las de whisky, sí hay un genio amigable que recuerda cada deseo y te corrige si repites, eso dicen…

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  • Hola a todos. Con este comentario se cierra el concurso de junio. Como hemos estado en reparaciones, participarán tanto los textos dejados aquí como los que aparecen en el sitio temporal. Gracias y hasta pronto.

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  • SE QUE ES TARDE, PERO QUERÍA COMPARTIRLO.
    SALUDOS!
    He decidido tomar acciones radicales respecto a mis fracasos amorosos. El tuyo es el que inaugurará esta nueva etapa. En principio, podemos citar algunos de mis avances, como que, por ejemplo, no he esperado mucho tiempo para darme cuenta que eres una basura, y he pasado mucho menos tiempo esperando tus llamadas. En segunda, no ha pasado realmente nada entre tú y yo, salvo darte un beso, cosa que se la podría dar hasta a un perro callejero y por lo tanto no es algo significativo. Y sobre todo, ahora me atrevo a más: he decidido herirte antes de sentirme herida por ti. Y es así como no quiero perderme ningún detalle del movimiento de mi mano al estrellarte esta hermosa botella en la cabeza. Quiero observar a detalle el recorrido del líquido en su interior, la rotación ágil pero con gracia de mi muñeca y la caída final del objeto sobre ti. Ya imagino el sonido seco al estrellarse. Anhelo ver como te entran los vidrios y como tu cabeza se convierte en una fabulosa fuente. Y ahí va…

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  • Cuando apareció la botella en sus manos, Lucio se dio cuenta que no podía darle más golpes a la piñata esa que le cambiaba la apariencia y el objeto en las manos cada vez que la aporreaba. Sobre todo porque era difícil alcanzar ese tono de rubio platinado con su cabello natural, tan moreno.

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  • Hola a todos. He aquí los resultados del concurso de junio, y también mi agradecimiento por venir hasta acá y continuar participando. Luego de los resultados, un par de avisos:

    El ganador del mes es el cuento sin título de Gabriel, por su visión melancólica que a la vez logra no ser sensiblera y quedar sumamente condensada.

    Reciben menciones el cuento sin título de Jorge Octavio Ocaranza (haría falta un título: ¿pensabas en la estatua consciente de Condillac?, de ser así tal vez podría servirte algo que se refiriera a la idea) y el también sin título de María.

    Recibe una mención adicional, y muy especial, el cuento «Advertencia» de Z, quien no es otro que José Luis Zárate, excelente narrador mexicano y además, en últimas fechas, uno de nuestros mejores y más constantes autores de minificciones, como puede verse en su blog «Cuenta atrás» y en su página de Twitter (de más está decir que los invito a seguir a José Luis en cualquiera de estos sitios).

    Los avisos: primero, el concurso de julio no aparecerá aquí sino en «Las historias en el exilio», mañana. Segundo, la razón es que este blog ya está reparado, pero vamos a aprovechar la pausa para actualizarlo a la más nueva versión de WordPress y rediseñar la plantilla. Desde aquí mando mi agradecimiento a Ángel de Anda, nuestro sufrido webmaster…, y desde luego, como ya decía, a todos ustedes. Hasta mañana.

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