Taller literario

Argumentos irónicos

La ironía está de moda: lograr la discrepancia entre lo que se dice y lo que entiende de lo dicho es facilísimo, como sabe cualquiera que ha visto un episodio de Los Simpson o de las otras, incontables historias que utilizan el mismo recurso una y otra vez. Pero todavía sirve ensayarla para ver cómo funciona.

Un ejercicio posible: imaginar un argumento irónico (un solo párrafo es suficiente) en el que un personaje dado se propone con todas sus fuerzas hacer algo y logra, después de mucho esfuerzo, exactamente lo contrario. Un ejemplo rápido:

Un poeta dedica su vida y su obra (se tiene por alguien comprometido con las necesidades de su momento histórico) a la promoción de una ideología progresista. Crea una obra copiosa y encendida; recibe grandes honores, es favorito de mucha gente, y al morir es recordado… como el gran autor de la derecha: el más lúcido y apasionado defensor del conservadurismo. Eso es lo que sus lectores, que tanto lo quieren, ha encontrado siempre en sus textos.

La sección de comentarios queda abierta, como siempre, para las propuestas de los lectores.

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Dimensiones del diálogo (1982)
Dimensiones del diálogo (1982)
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20 comentarios. Dejar nuevo

  • Información Bitacoras.com…

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  • Fiasco

    Aunque mi corazón siempre tembló con la mención de Alá, aunque ayuné y practiqué la oración y la limosna, no conseguía arrancarme el tormento de la tentacion. Sólo inmolándome en la lucha contra el infiel logré asegurarme el paraíso.

    Mas ahora que en el jardín de las delicias gozo a las hurís de grandes ojos negros, sigo soñando que cada cuerpo que estrecho entre mis brazos es el de mi amado Yusuf ben Abdulah.

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  • Alejandro Hernandez
    12/02/2010 5:59 pm

    Es una cuestion de metodo el logro de las letras
    es muy facil poder indicir para dedicar un inicio
    me agrada mucho la forma de las letras
    cuando toman una estructura interesante
    es un muy buen consepto de lo que habla sobre lo real y
    lo que apenas se esta por hacer..

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  • Elisa: 🙂

    ¿A qué te refieres, Alejandro?

    Saludos…

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  • Un juego literario: crear argumentos irónicos. http://bit.ly/9rfruD

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  • Supongo, Alberto, que «lo que Alejandro quizo decir», o en este caso hacer, es cumplir con la idea de la ironía a través de un elogio a las letras y a la estructura de las frases plagado de errores hortojraficos y de zintacsis…

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  • Tienes toda la razón, Fernanda… :S Una disculpa a Alejandro (mi estado mental dejaba que desear anoche).

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  • Mis propósitos siempre fueron buenos ¿Cómo iba yo a querer lastimarla si la amaba hasta la desesperación? Siempre la consentí. Si ella decía rana, yo daba un brinco. Me empeñé en hacerla sentir bien, en que cuando estuviera conmigo se sintiera segura, atendida, entendida, acompañada. Conmigo no podía faltarle nada, no le ofrecí riquezas, pero sí estabilidad. Un techo, una cama, le compre su camioneta, la vestí con la ropa que ella quiso, jamás le dije que no a nada, ni cuando propuso que compartiéramos nuestros cuerpos con otras personas o cuando le pagué ese sospechoso viaje a Europa con ese gañan que se decía su primo ¿Cómo le dices a alguien que te ha dado todo, que no quieres volver a verle? Ella me lo dijo así nomás, sin anestesia. Créame señor juez, yo no la maté, fue la muina que se apoderó de mis manos y apretaron fuerte, fuerte hasta que su pescuezo hizo ¡Crac!

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  • Un hombre anodino (Inversión de la propuesta Chimal)

    Se esforzó toda su vida por pasar desapercibido. Se hundió en un apartamento, cambiando continuamente de aficiones, se deshizo de todo factor que le hiciera discernible; razgos faciales, vestimenta, palabras, todo en él eran atributos de un hombre anodino. Tras recluirse, olvidó a todos sus amigos y familiares. Una mañana, al cabo de muchos años, decidió salir a la calle. Toda las paredes estaban tapizadas con su foto. Los lomos de libros registraban solamente su nombre y, al interior de sus páginas, otra vez su nombre. Comprendió que era famoso y que un suicidio colectivo, previo a su esperada salida, había acabado con toda la ciudad. Una mujer de vestido rojo grabó una videocarta para él. Decía:
    -Amor, estoy sola, completamente sola.
    Y después la videocarta explotó.
    Los libros de historia registran este mito con el título:
    «La luna es una moneda de plata que activa una noche automática»

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  • En una ciudad cualquiera se dan los primeros brotes de una nueva enfermedad que amenaza convertirse en una epidemia, pues no se conoce manera de combatirla. Un puñado de gente, temerosa, decide enclaustrarse en sus respectivas casas sin salir ni un instante para evitar cualquier posible infección. Pasado un tiempo, la epidemia sólo cobra un puñado de víctimas: los que se habían refugiado en sus casas. Y es que esta enfermedad surge en espacios cerrados y se combate con corrientes de aire.

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  • Como este ejercicio está tomando vuelo, de momento me callo. Y leo. Saludos a todos.

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  • Don Ricardo se decía el más ferviente admirador de Don José. Era capaz de recitar, de memoria, en español y en portugués, pasajes íntegros de Memorial de un convento. Leyó y releyó cada una de sus obras tantas veces que perdió la cuenta. Comenzó a escribir artículos, a participar en seminarios y a formar grupos de debate al rededor de la literatura del premio Nobel. En poco tiempo, era considerado uno de los más finos especialistas en el trabajo del portugués. En ese trajín, escribió sendos tratados en el que tejía líneas conductoras entre obras previas y las de su escritor favorito. Especialmente con Kazantzakis. En vísperas de un escándalo sobre plagio que recluyó al escritor en su finca de Lanzarote, su gran admirador pudo al fin conocerlo. Don José, cuando le presentaron a su seguidor, lo miró con más desprecio que indiferencia y apenas le dirigió una mueca antes de darle la espalda. Ya en su alcoba, el lusitano le comentó a Pilar, su esposa, que no soportaba a ese mequetrefe. Don Ricardo, con la mirada sombría y una sonrisa quimérica, dijo para sí mismo mientras se alejaba de la vida (y de la obra) de su autor favorito: «Somos cuentos contando cuentos, nada»

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  • JOYAS DE LA LITERATURA

    Al sentarle las vacas sagradas como patada en los mismísimos y notando que ya había demasiados autores convencidos de que mamón y solemne eran sinónimos, el escritor novato se dedicó entonces a crear una literatura divertida, serena, ligera. El asunto es que cuanto más agradable se proponía ser en sus textos y en sus relaciones públicas, la acritud del medio le golpeaba los dientes sin parar: de sus colegas recibía periodicazos, boicots, burlas y traiciones que dejaban a Judas en calidad de amateur. El autor (ya no tan) novato continuó su camino, olvidando agravios y tragándose su pena, pero la amargura era cada vez más difícil de disimular, lo que al paso de los años le volvió cada vez más intratable. Finalmente, cuando la tristeza, la furia inocultable, la soledad, la miseria integral y el cáncer de hígado se lo llevaron a la tumba, nadie se sintió cómodo, ni siquiera sus antiguos adversarios, quienes se esmeraron en dotarle de funerales, exequias y homenajes extemporáneamente amables. Los que en su momento conspiraron arduamente para destruirlo ya ni se acordaban de por qué el muerto era tan hostil hacia ellos. Lo importante sería, en adelante, rescatar su trabajo del olvido para que las nuevas generaciones descubrieran una obra literaria brillantísima y graciosa, producto de una felicidad que el artista, inexplicablemente, jamás pudo alcanzar.

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  • POLUCIÓN Y DERRAME

    La quería demasiado. Tanto que en el fondo del alma sintió un poso de celos como plomo fundido, un remanente odioso de posesión y celos que le hizo guardar distancia para protegerla de sí mismo. Aún así, la cortejó con prudencia y a la vez con interés. La escuchaba, buscaba crearle un entorno feliz, la consentía y se esmeraba en comprarle lo mejor, en cumplirle caprichos y otorgarle todo aquello que la hiciera sentirse plena sin llegar a sofocarla. Ella aceptaba todo ello, y el amante se sentía feliz, aunque aún sentía ese poso manchando lo que debía ser perfección, plenitud, agradecimiento a la vida por el amor pleno. Tal vez por ello, al descubrir su engaño, la furia que lo invadió generó a su vez una emoción nueva: una pequeña pero constante felicidad que poco a poco fue contaminando su desgracia para transformarla en un gozo incontenible que lo liberaba de cualquier melancolía. Comprendió al fin que ese poso repugnante que lo atormentaba no era otra cosa que la libertad, desbordándose entre sus manos al igual que la sangre de la amada que ya no era tal: la libertad de quien se libra de un amor no correspondido. La libertad última y absoluta de quien ya no siente amor.

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  • SCI-FI SUICIDA

    SE ARROJÓ POR EL VENTANAL del inmenso rascacielos.
    Lágrimas atomizadas de cristales rotos y suspendidos.
    Cientos de ventanillas lo vieron descender como pupilas borrachas que miran en cámara lenta.
    Su presión se elevaba. Su corazón, violento ostinato de percusiones, propinó vida por todo su cuerpo. Cortejar a la muerte lo hizo sentir tan total.
    Ya era demasiado tarde para cambiar de idea; no la del suicidio sino la del método pues alguno efectivo tenía que ofrecerle aquel chingado planeta cuasi-ingrávido, y tal vez no tendría que quebrarse la cabeza para encontrarlo.

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  • La mujer más feliz del mundo terminó en una situación muy triste: todos los demás odiaban recordar que había alguien, en esta maldita esfera giratoria, que era verdaderamente feliz.

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  • Porque ya no soportaba sentirse tan sola todo el tiempo, abrió la ventana y se lanzó al vacío; lástima que cayese justo sobre un agujero gusano y que terminase en un planeta estéril y sin un solo habitante.

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  • Lógica y conjuntos biográficos
    Durante los años de universidad escuché constantemente la recriminación de algunos profesores hacia los estudiantes de que nosotros éramos parte del privilegiado 2% de la población que asistía a la educación superior privada. Para pagar ese privilegio, ahora soy parte de los más de 12 millones de indocumentados en USA.

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  • ÍRONÍA I.

    En el reino de las ironías: Un mudo le dijo a un sordo que escuchara a un manco tocar el piano, mientras un ciego veía correr a un cojo que le exigía al mudo que se callara. El cronista fue denunciado ante el CONAPRED, para después ser contratado como conductor de un noticiero televisivo.

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  • IRONÍA II.

    National Geographyc. Reporte Especial.- En los Estados Unidos ha avanzado a tal grado la ciencia, que en cierto hospital pueden quitarle la mitad del corazón a un hombre y que éste a las dos semanas ya trata de conseguir empleo.

    En Alemania, por su parte, han avanzado tanto en la neurocirugía, que consiguieron sanar a un hombre que había perdido la mitad de su cerebro y a penas a los seis meses, éste conseguía empleo.

    En Japón, en cambio, los avances han sido asombrosos en el área de la recuperación, un hombre a quien le tuviron que extirpar los testículos, al día siguiente ya estaba buscando trabajo.

    No obstante, los avances más importantes en estas áreas de la ciencia médica los ha reportado México, donde un hombre sin corazón, sin cerebro y sin testículos lo ponen de presidente y a los seis meses ocho millones de personas ya estában buscando empleo.

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